Mercabarna cerrará su matadero a finales de septiembre por ser "deficitario"

El consejo de administración de Mercabarna ha acordado cerrar su matadero a finales de septiembre por ser un servicio "deficitario", coincidiendo con la finalización del contrato de la empresa Condialmentserveis, que ofrece el servicio y donde trabajan 80 personas.

El mercado mayorista de Barcelona ha explicado en un comunicado que el cierre se ha acordado por unanimidad en un momento en que, para garantizar la continuidad de las instalaciones, la Agencia de Salud Pública de Barcelona exige una remodelación íntegra del edificio y de la maquinaria. Estos trabajos obligarían a cerrar, al menos, durante un año, e invertir 11 millones de euros en cinco años, sin contar la maquinaria. En la actualidad, unas 80 personas trabajan en el matadero de Mercabarna de la empresa Condialmentserveis SL y el mercado mayorista se ha comprometido "a dialogar con sus representantes para ayudarles a abordar su futuro laboral". 

En el matadero de Mercabarna se sacrifican al año unas 22.000 toneladas de ternera, cordero, cabrito y caballo y se presta servicio, principalmente, a dos empresas cárnicas situadas dentro de las instalaciones del mayorista. Por este motivo, desde 2015, Mercabarna asegura que ha realizado "numerosas gestiones comerciales" para intentar aumentar el volumen de negocio del matadero y garantizar su viabilidad y el mantenimiento de los puestos de trabajo, sin resultado. Además, recuerda que en 2017 se convocó un concurso de gestión que quedó desierto al no presentarse ningún operador. 

Mercabarna recuerda que en Cataluña hay "muchos otros mataderos, públicos y privados, con capacidad suficiente" para absorber el trabajo que se realiza en Barcelona y considera que, al igual que ocurre en otros mercados mayoristas de España, "es perfectamente posible la existencia de empresas manufactureras de carne en estos mercados, sin que haya un matadero dentro del mismo espacio". El mercado mayorista de Barcelona considera que debe incorporar empresas que aporten "más valor añadido al producto, de comercio en línea, especialistas en proximidad, en productos ecológicos, cadenas de distribución, etc" y tampoco descarta construir un matadero privado. 

El matadero se instaló en Mercabarna en 1979, procedente de las antiguas instalaciones del parque Joan Miró y "siempre ha sido deficitario", según las fuentes, que aseguran que ha generado unas pérdidas acumuladas de más de 22 millones de euros. En este sentido, Mercabarna ha recordado que el Tribunal de Cuentas emitió en 2015 un informe que consideraba "improcedente" mantener este establecimiento con "pérdidas continuadas".

El consejo de administración aún no ha decidido el uso que dará a la parcela de 27.362 metros cuadrados que quedará libre, especialmente ante las nuevas demandas de los consumidores.